……..#BREVIARIO
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Soy madre de gemelas y abogada. Nací en Rosario (Argentina), una ciudad a orillas del río Paraná, hace cuarenta y cuatro años y, aunque hace más de diez que vivo en el extranjero (siempre en ciudades que empiezan rigurosamente con la letra eme: Miami, Milán, Madrid), aún conservo el humor turbio y revoltoso que me legaron las aguas del río. Parezco delgada, si se me mira a los ojos. Y simpática, si no se advierte cómo estrujo los dedos cuando me impaciento. Lamentablemente eso sucede a menudo; no sé si la culpa la tengo yo o los demás. Creo, como Kafka, que en la lucha entre uno y el mundo, hay que tomar partido por el mundo. Vivir es, por tanto, un esfuerzo incesante.
Si hago memoria, recuerdo que me dicen “señora” desde siempre. Porque nací anacrónica y, encima, con remolinos. Me peino mucho y sin convicción. Sé que ni el gel ni mis esfuerzos llegan a la coronilla, aunque se aproximen bastante. Así es que en la parte posterior de mi cabellera (como en el reverso de todas las cosas) está lo más verdadero de mi pelo. O lo más salvaje. Quizá la verdad sea eso que está cerca, muy cerca de lo indómito.
Me gustan mucho los libros y creo, por sobre todas las cosas, en la belleza. Y es de eso de lo que voy a hablarles en este Breviario. La verdad es que no sé si lo bello existe o acontece en el ojo del que mira. Yo miro mucho, tanto que, a veces, me desespero y tengo que cambiar de paisaje. Es por eso que, quizá, en un futuro, vuelva a mudarme a una ciudad que comience con rigurosa letra eme. Tendré que cargar con mis dos hijas y mis muchos libros, pero no me importa. Porque sé que la verdad está siempre más allá, lejos, en el reverso de todas las cosas, y que vivir supone un esfuerzo incesante.
Bienvenidos a mi #BREVIARIO.