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Notas autobiográficas de FEDE CAVALLI.
Nací en Cevio (Suiza), el 19/4/1936.
Estoy viva gracias a la diálisis.
¿Por qué he empezado a hacer fotografías?
Desde hace varios años compongo pequeñas escenas para fotografiarlas. Los protagonistas son minúsculos iconos pintados sobre madera. Tal vez para lograr acceder a mi pintura en el contraste con la realidad doméstica, hospitalaria y social.
¿Por qué he iniciado a hacer collages y a pintar?
Mi mamá era sastra de hombres. Confeccionaba también vestidos para señora. Yo le ayudaba a coser el dobladillo y algunos trabajitos. ¡Era bravísima mi madre!
La mamá también se ocupaba de las gallinas, que se escapaban del gallinero. Hacían el nido para depositar los huevos debajo del hórreo del vecino. Yo, por la noche, soñaba que hallaba el nido lleno de lápices de colores. Era un sueño bellísimo. La mamá estaba siempre con sus telas. Recuerdo una caja llena hasta los topes de rollitos de recortes de tela. Durante varios años los usé para divertirme creando collages.
Mi cultura de mujer montañesa.
A los 14 años tuve que dejar mi pueblecito, Prato-Sornico (Lavizzara), para poder ir a estudiar en un Colegio. He sido maestra de escuela primaria y secundaria. He enseñado durante varios años. Luego pedí un permiso para poder frecuentar la Academia de Bellas Artes de Brera en Milán, y la Sommer Academie dirigida por Oskar Kokoschka en Salzburgo.
En el año 1970 entró en mi vida Antonio. Había huido de la España de Franco a la edad de 21 años. Fue refugiado político en Francia durante 23 años.
Más tarde, en el año 1972 nació Paco, nuestro amuleto de la suerte.
Eran los años «di piombo». Los tiempos del pediatra Marcello Bernardi y su libro «Dalla parte dei Bambini». Todo era denuncia. Todo era contra la represión.
Represión familiar. Represión religiosa. Represión social y política. A mi manera he documentado la represión con la pintura al óleo sobre tela….
Pero no eran tiempos de pintura al óleo sobre tela……..
Note autobiografiche di FEDE CAVALLI
Sono nata a Cevio (Svizzera), il 19/4/1936.
Sono viva grazie alla dialisi.
Perché ho cominciato a fare fotografie?
Da anni compongo piccole scene da fotografare. Protagoniste sono minuscole icone dipinte su legno. Forse per riuscire ad accedere alla mia pittura nel contrasto con la realtà domestica, ospedaliera, e sociale.
Perché ho iniziato a fare collages e a dipingere?
La mamma era sarta da uomo Cuciva vestiti per donna. Bravissima. La aiutavo a cucire gli orli e a fare il punto a cavallo.
La mamma aveva anche le galline che scappavano della rete del pollaio. Andavano a farsi il nido dove depositare le uova nello spazio sotto il granaio dei vicini. E io di notte sognavo di trovare nidi traboccanti di matite colorate. Era un sogno bellissimo.La mamma era sempre alle prese con le stoffe. Ricordo uno scatolone strapieno di rotolini di ritagli di stoffa. Durante gli anni io la stoffa la usai per divertirmi a creare collages.
La mia cultura di donna montanara.
A 14 anni ho dovuto lasciare il paesino di Prato-Sornico (Lavizzara), per studiare in collegio. Sono diventata maestra di scuola Elementare e Maggiore. Ho insegnato per qualche anno poi ho chiesto congedo per frequentare l’Accademia di Brera a Milano e la Sommer Akademie diretta de Oskar Kokoschka a Salisburgo.
Nel 1970 è entrato nella mia vita Antonio. Scappato dalla Spagna di Franco a 21 anni. Rifugiato politico in Francia per 23 anni.
Poi nel 1972 è nato Paco, il nostro portafortuna. Erano gli anni di piombo. I tempi del pediatra Marcello Bernardi con il suo libro Dalla parte dei bambini. Tutto era denuncia. Tutto era contro la repressione.
Repressione familiare. Repressione religiosa. Repressione sociale e politica. E io a modo mio ho documentato la repressione con dipinti a olio su tela. E…… non erano tempi da olio su tela.
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Los Amigos de Cervantes 