Postales: Sorrento, Italia

Vale 2015 grande.

……..#BREVIARIO

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Vale Correa Fiz


En una de las habitaciones de este hotel italiano, Henrik Ibsen escribió su obra de teatro “Espectros” o “Los aparecidos”. La escribió como respuesta a quienes criticaron su, hoy célebre, “Casa de muñecas” por retratar a una mujer, Nora, que abandona su hogar.

Hotel Tramontano

Tanto se había dicho que la mujer no debía abandonar a su marido ni a sus hijos y que había ideales que estaban por encima de las verdades mismas, que Ibsen replanteó el tema sobre otras bases: Veamos entonces -dijo-, cómo se vive en un hogar que no está sostenido sobre la comprensión, el amor y el respeto mutuo. Y así pinta a la esposa que no se va, a la señora Elena Alving, la “Nora que se queda”, o por lo menos la Nora a la cual un hombre apegado a los convencionalismos sociales, el pastor Manders, rechaza y hace volver junto a quien es su esposo ante las leyes.

El título de este drama de realismo crítico refiere, entre otras cosas, a los usos y costumbres heredados que rigen la vida de los hombres. La carga atávica que nos condiciona. “Si me encuentro tan angustiada, tan temerosa —le dice Elena Alving al pastor Manders— es porque hay un mundo de espectros que me rodean, de los cuales estoy segura que no llegaré nunca a desprenderme.” “… todos somos espectros. No es sólo la sangre de nuestros padres lo que anda por nuestro interior; los espectros son toda clase de ideas muertas y viejas creencias sin vida. No tienen vitalidad pero se cuelgan de nosotros y no nos podemos desprender de ellos. Si tomo un periódico me parece ver espectros deslizándose entre las líneas. Todo el país debe estar poblado de espectros, hay tantos como las arenas del mar.”

De cara al mar pienso en la tremenda actualidad de este texto escrito en 1881. Estamos gobernados por viejas ideas que no cuestionamos, por fantasmas, me digo, que son como la niebla que ascendía hoy desde el mar en Sorrento.